Aunque el retorno de la inversión no es inmediato, puede ser muy rentable si se tiene en cuenta el ahorro y la posible reventa de energía. Por eso, la espinosa cuestión de la rentabilidad se plantea regularmente a quienes desean instalar paneles solares.
Presentes cada vez en más tejados en España e incluso en el espacio, los paneles solares son populares porque permiten beneficiarse de una energía renovable y barata.
Sin embargo, la inversión inicial es importante. Además de la compra de los paneles solares, también hay que pagar la instalación de los paneles en el tejado y, en algunos casos, la conexión. Este último punto es necesario para quienes quieran vender la energía sobrante producida por los paneles.
Aunque es difícil estimar con exactitud cuándo resultan rentables los paneles solares, hay varios factores que pueden tenerse en cuenta en el cálculo.
Paneles solares: los criterios para que sean rentables
El primer criterio importante que influirá en la rentabilidad de los paneles es el rendimiento de la instalación.
Éste depende de la duración anual de la insolación, del calor medio de la Comunidad Autónoma, de la inclinación de los paneles y de la superficie del tejado en el que están instalados.
El segundo criterio es la potencia de los paneles instalados. Aunque rara vez se alcanza la potencia máxima, cada modelo tiene una tasa de producción máxima designada en kilovatios-pico (kWp).
El tercer criterio a tener en cuenta es el consumo futuro de los habitantes del hogar. Para ello, se pueden utilizar como base las facturas de energía anteriores.
Por último, hay que tener en cuenta el autoconsumo y las posibles ventas de excedentes si las condiciones de partida son buenas.
Cálculo para determinar la rentabilidad de la instalación
Para determinar si la instalación será rentable, primero hay que calcular la inversión inicial. Esto incluye el precio de los paneles, su instalación, el certificado y la conexión.
Después hay que calcular la producción multiplicando la potencia de los paneles por el coeficiente medio de insolación de tu región, incluido el periodo invernal.
Existen mapas gratuitos en Internet con esta información. A continuación, basándose en las facturas actuales, estime el consumo anual, las reducciones y los posibles beneficios de la reventa de energía. Existen simuladores online para estos cálculos.
Sin embargo, se estima que, según los criterios, una instalación es rentable al cabo de 8 a 10 años.
¿Es mejor consumir la energía directamente o venderla?
Cuando se va de vacaciones en invierno o en verano, su consumo de electricidad no es máximo durante el día, cuando el sol genera electricidad. Teniendo esto en cuenta, es mejor vender la electricidad a su compañía afiliada que consumirla usted mismo.
¿Los paneles solares desgravan?
Puede estar exento del impuesto sobre la renta si su instalación cumple las siguientes condiciones:
- La potencia de tus paneles solares debe ser inferior a 3 kWp
- Su instalación está conectada a la red pública en un máximo de dos puntos
- Su panel solar no está destinado a una actividad profesional.
¿Cuál es la superficie recomendada para instalar su panel solar?
Para una casa de 100 m2 que funcione totalmente con electricidad, una instalación de 3 kWp puede ser suficiente.
Esto significa normalmente 10 paneles solares. Si hay que tener en cuenta la necesidad de una piscina y aire acondicionado, entonces son suficientes 20 paneles solares.
¿Qué ayudas existen para la instalación de paneles solares?
Subvenciones aproximadamente de 800 euros/kWp en instalaciones sin acumulación y 2.000 euros/kWp en instalaciones con acumulación, con un máximo del 40% del presupuesto total.
Ayudas: la bonificación sobre el IBI es de un 30% durante 5 años. No es de competencia autonómica y depende de cada municipio.
La subvención podrá cubrir cualquier parte del presupuesto para instalar paneles solares: los materiales, la mano de obra del instalador, la redacción de la memoria técnica, la gestión de los trámites administrativos para pedir la ayuda…
Eso sí, para que los gastos se puedan cubrir en la subvención, han de incluirse en el presupuesto total incluido en la solicitud de la ayuda y que este presupuesto se justifique mediante contrato, facturas y justificantes de pago.
